El 13 de mayo de 2016 Maya, funcionaria de vigilancia de instituciones penitenciarias, conducía a su casa tras una larga jornada laboral en el centro penitenciario de Madrid V – Soto del Real. A la altura de Colmenar Viejo, el coche que iba delante de Maya, conducido por un hombre de mediana edad, frena levemente para evitar atropellar a un conejo pero a Maya no le da tiempo a frenar y golpea brutalmente al otro coche provocando la muerte de su conductor. El 21 de diciembre de 2016 Maya es condenada por sentencia firme por un delito de homicidio por imprudencia menos grave tipificado en el artículo 142.2 del Código Penal y castigado con multa de tres meses a dieciocho meses. El juez consideró que Maya no cumplía la distancia de seguridad adecuada y le impuso dieciocho meses de multa a razón de 300 euros diarios. El 10 de diciembre de 2016 Maya es sancionada disciplinariamente a un año de suspensión firme de funciones por haber desobedecido una orden directa de su Jefe de Servicios. *NOTA 1: la falta de obediencia debida a los superiores y autoridades es una falta graves castigada con hasta 3 años de suspensión de funciones *NOTA 2: la suspensión firme de funciones conlleva quedar privado durante el tiempo de permanencia en la misma del ejercicio de sus funciones y de todos los derechos inherentes a la condición. No se retribuye al funcionario en esta situación.