A Virgilio H.P., químico de profesión, ha estado percibiendo pensión de viudedad, por Clases Pasivas del Estado, desde el fallecimiento de su esposa María L.A. en el año 2008, que era funcionaria del Cuerpo de Gestión de la Administración General del Estado – Subgrupo A2 -. María llevaba en servicio activo en el actual Ministerio de Hacienda desde hacía catorce años hasta producirse el óbito en extrañas circunstancias. No poseía ningún otro periodo cotizado a clases pasivas ni a ningún otro régimen de la Seguridad Social. En el momento de fallecer contaba con 40 años. El fallecimiento de María, como queda dicho, estuvo rodeado de numerosos interrogantes. De gozar de inmejorable salud, en unos doce días se produjo su fallecimiento tras persistente hemorragia intestinal, diarreas y deshidratación, sin que los médicos realizaran un diagnóstico preciso de la dolencia de María. Practicada la autopsia a instancias de los servicios médicos, se detectaron en su organismo restos de la sustancia ricina, concluyendo que el fallecimiento de María se había producido por envenenamiento. Tras una laboriosa investigación policial, se hallaron pruebas suficientes como para imputar a Virgilio como responsable del fallecimiento de su esposa. Fue detenido, puesto a disposición judicial y decretada su prisión provisional con cargos en el año 2014, concretamente el 12 de febrero. En el momento del fallecimiento de María, el matrimonio tenía dos hijos de 4 y 7 años. Finalmente Virgilio fue condenado en firme a prisión por un delito de asesinato en la persona de su mujer en el año 2016.